COVID-19 en Europa: ¿cómo lidió Europa con la pandemia?
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La pandemia del COVID 19 es un problema mundial que sigue requiriendo políticas de emergencia en muchos países. Es imposible estar preparado para un problema de tal magnitud y tan complejo. Nuevas cepas implican riesgos latentes, que algunos países enfrentan con terceras dosis para reforzar la protección de sus ciudadanos.
En el caso de Europa, ha tenido sus altas y bajas enfrentando esta pandemia. Aunque ahora mismo los resultados sean alentadores, costó muchas muertes, errores, obstáculos, hasta llegar a un nivel de control relativo de tan delicada situación.
Italia como epicentro mortal
El comienzo de la pandemia tuvo como epicentro a Italia, después de China, donde se contuvo con velocidad gracias a la disciplina que caracteriza a aquel país, en Italia el virus por el contrario avanzó en varias ciudades e incluso llegó a otros países.
China y Cuba auxiliando a Europa
Siendo Italia un epicentro tan peligroso y con la alarma mundial ya activada, la ayuda vino de donde menos se esperaba. China envió equipos médicos a Italia, mientras Cuba envió batallones de médicos a una zona donde difícilmente otro país enviaría ayuda humana de este tipo.
La razón de la ayuda de China es que el comienzo de la pandemia encontró a países desarrollados en una lucha por equipos médicos. Las aduanas retenían los respiradores en razón del interés nacional, algo que se repitió mucho posteriormente en EEUU. Simplemente el mercado tampoco estaba listo para enfrentar una pandemia.
Diferentes políticas entre países de la Unión Europea
Después de Italia, España fue el país más afectado pero en esta fase, la confusión empezó a reinar, ya que algunos países exigían restricciones a las personas, cuarentena estricta, mientras otros apuntaban a la inmunidad del rebaño, lo que con servicios de salud colapsado implicó un “Sálvese quien pueda”.
Al interior de España, se dio un caso excepcional con comunidades como Madrid, donde en algún momento el número de fallecidos llegó a ser más de la mitad de todo el país, esto impulsado por muertes en las residencias de ancianos y la reticencia de muchos de sus habitantes a respetar las medidas de prevención, lo que llevó a España, como muchos otros países, a aplicar castigos por violar estas normas.
En Suecia el número llegó a ser tan alto que, durante algunos meses, estuvo entre los países con mayor proporción de muertos por habitantes en Europa.
Con la pandemia algo avanzada, llegó la vacuna y el plan avanzó a buen ritmo. Ahora mismo todos los países europeos tienen un alto porcentaje de vacunación.
La prohibición de entrar a bares o a fiestas grandes sin el certificado de vacunación, ha creado grandes colas para vacunarse en España. En ellas muchos negacionistas que juraban luchar contra una conspiración mundial, ahora accedieron a vacunarse para no quedarse sin entrar al bar a disfrutar de sus copas.
